La gran
asignatura pendiente de los profesionales españoles, junto al dominio de
idiomas extranjeros, es la movilidad laboral. El nivel de vida del que se
disfrutaba hasta hace poco tiempo y el arraigo familiar son los dos principales
factores a los que se achaca esta escasa predisposición al cambio de
residencia.
Pero la situación económica está consiguiendo cambiar esta
característica de la vida laboral de los trabajadores de nuestro país. El alto
índice de paro, sobre todo entre los más jóvenes (más del 50%, según las
últimas encuestas), y las reducciones de salario están empujando fuera de
nuestras fronteras a muchos, aunque no son los únicos motivos. El hallar una
buena oportunidad de desarrollo en el campo profesional de nuestra elección
también pesa a la hora de tomar esta decisión.
Está
claro que la movilidad es cada vez más un factor que pesa mucho a la hora de
encontrar un empleo. Las oportunidades laborales pueden surgir lejos del
domicilio habitual y las distancias no siempre son asequibles para realizar el
viaje de ida y vuelta cada mañana y cada tarde. Y los trabajadores lo saben.
Por eso los últimos estudios realizados al respecto reflejan que alrededor del
60% de los españoles no tendría inconveniente a la hora de aceptar un puesto de
trabajo en otra provincia, en principio, o en otro país. En general, se
prefiere un Estado de la Unión Europea, seguido de países de habla inglesa, y
los llamados emergentes, como India, China, Brasil o Rusia. Por géneros, son
los hombres los más proclives a este cambio geográfico, pero el porcentaje de
mujeres dispuestas a encontrar su futuro más allá de los Pirineos aumenta cada
año. También es una cuestión de edad, cuanto más jóvenes, más fácil es que
deseen una salida laboral en el extranjero, a cuanta más edad, más problemas
hay a la hora de tener en cuenta esta opción. En este sentido, pesan mucho las
cargas familiares que pueda tener el candidato.
Como
consecuencia de la situación que vive España, desde el año 2008 y hasta finales
de 2011, el número de españoles mayores de edad residentes en el extranjero ha
aumentado un 25%. Y los líderes de la UE animan a seguir por ese camino. Hace
pocas semanas, el comisario de Empleo de la Unión instó a los jóvenes a buscar
empleo fuera de sus países de origen para dar respuesta a las necesidades de
profesionales cualificados, sobre todo, que tienen algunos de los Estados de la
UE, como Alemania, cuya canciller ha dicho también que su país recibirá con los
brazos abiertos a aquellos que deseen emprender esta aventura.
El
número de desempleados de nuestro país se mantiene alto desde hace varios años
y el mercado laboral difícilmente podrá absorber en un plazo razonable a todas
estas personas. Por eso, la salida a buscar nuevas oportunidades laborales es
una opción que tiene cada vez más adeptos entre los profesionales cualificados
que desean seguir desarrollándose. La escuela de negocios ESCP Europe recogía
recientemente en un estudio una cifra que ilustra esta tendencia: el 44% de los
estudiantes de programas de posgrado o alumnos de másters encuentra trabajo
fuera de su país de origen. Y si tenemos en cuenta los niveles retributivos, la
situación es aún más atractiva cuanto más lejos se vaya uno. Un estudio de
Mercer muestra cómo aunque los salarios de Europa y Estados Unidos han sido
tradicionalmente los más competitivos,quizá son ahora los asiáticos los más
atractivos.
1 comentarios:
Yo creo que lo del español casero viene cambiando desde hace tiempo. Hace unas semanas publiqué un artículo en el blog que colaboro en el que escribo acerca de ese tema y basándome en las estadísticas de los más célebres programas de movilidad, argumento que ese mito, hoy en día, está en vías de desaparición. Les dejo el vínculo por si acaso os interesa: http://www.trabajo-ya.net/al-espanol-no-le-gusta-salir-de-espana/
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