LOS BECARIOS YA COTIZAN

Desde el 1 de noviembre los becarios cuyas practicas sean remuneradas ya pueden cotizar en la Seguridad Social. Esto quiere decir que las compañías que tengan a becarios en prácticas estarán obligados a pagar su cotización. La empresa se verá obligada a pagar la base mínima de cotización que es de 48 euros mensuales, de los cuales 6 los paga el becario. Esta ley lo que pretende es dar a los becarios la misma protección que se le da a un empleado.

Así pues, a partir de ahora cada día de realización de prácticas remuneradas la empresa computará como vida laboral a efectos de pensión, bajas por enfermedad, accidente o maternidad. Sin embargo, no podrá cobrar la prestación por desempleo. Esta es la única prestación que no tendrá.

El Ministerio de Empleo calcula que hay 30.000 personas que se beneficiarán de esta situación. Además, esta ley da la posibilidad a aquellos becarios que lo han sido hasta el pasado 31 de noviembre puedan cotizar hasta dos años con carácter retroactivo. Sin embargo, esta cuota que habría que pagar a la Seguridad Social rondaría los 150 euros e iría por parte del interesado. Lo que nos hace pensar que sólo lo harán aquellos becarios que hayan tenido una remuneración interesante.

El procedimiento que ha de seguir un exbecario que quiera solicitar la cotización con carácter retroactivo (hasta un máximo de dos años) es el siguiente

1. 
   
   presentar un certificado expedido por el empleador que acredite que fue becario durante el período que se quiere rescatar.


2. 
   
   firmar un convenio individual con la Seguridad Social.

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¿PREPARADO PARA SUPERAR CON ÉXITO UNA ENTREVISTA DE TRABAJO?

La entrevista de trabajo es uno de los pasos a los que tendrás que enfrentarte si estás buscando empleo. Desde aquí no pretendemos darte un modelo de entrevista estándar para que salgas exitoso de ella, pero sí que vamos a intentar orientarte para que salgas lo mejor posible y no falles en algunos puntos clave para un seleccionador.
Debes cuidar tu vestimenta, tu comunicación no verbal, la puntualidad, y ensayar algunas preguntas. Pues en esto tan básico aún hay gente que falla.

Antes de ir a una entrevista de trabajo hay que preparase a fondo:
-Una de las cosas que debemos hacer es documentarnos sobre la compañía. Esto es fundamental. Piensa que es una pregunta que suelen hacer los consultores una vez te han explicado el puesto de trabajo al que postulas. Decir que no la conoces muestra poco interés por la posición, en cambio poder hacer un resumen de lo hace la empresa nos hará ganar puntos. Si antes de acudir al encuentro no has realizado tus pesquisas sobre este punto, quizás deberías replantearte si realmente estás interesado en trabajar en dicha firma.

-Otro aspecto que debemos planificar es el vestuario que nos pondremos. Este debe de ser acorde a la posición a la que te presentas, pero también al tipo de empresa. No hace falta que te compres ropa nueva para la ocasión. Si te maquillas opta por algo discreto y natural. Además, deberás de ser puntual. Lo correcto es llegar 5 minutos antes o justo a la hora. Nunca más tarde. Si te vas a retrasar llama y avisa. Detalles como estos dicen mucho de tu personalidad.

-Cuidar el lenguaje corporal. Intenta no sentarte con los brazos cruzados o demasiado rígidos. Tampoco el otro extremo relajado como si estuvieras en el sofá de tu casa. Cuando saludes a quien te entrevista, toma su mano de manera firme, mirándolo siempre a los ojos e intenta sonreír de vez en cuando. Si sonreír te cuesta mejor no forzar la sonrisa pues puede quedar falso. Piensa cómo lo haría una presentadora de un informativo. Intenta fijarte en cómo se sientan, en si se tocan el pelo, en cómo van vestidas. Han sido entrenadas para ello. Si puedes ensaya delante de un espejo.

-Además deberás practicar algunas preguntas típicas que con mayor frecuencia aparecen en las entrevistas laborales como por ejemplo: ¿Qué sabe de nuestra empresa?¿Por qué razón ha enviado su solicitud a nuestra empresa? ¿Cómo eligió sus estudios y por qué? ¿Qué piensa que puede aportar a nuestra empresa? Cuál es la situación más difícil a la que ha tenido que enfrentarse en su profesión? ¿Qué haría si estuviera en desacuerdo con algún superior? ¿Por qué lleva tanto tiempo en el paro? o ¿por qué dejó su último trabajo?.
Llevar preparadas algunas preguntas sobre el puesto, la empresa y el proceso de selección puede ser de gran ayuda. Sin embargo, recuerda que el éxito en una entrevista de trabajo no sólo depende de contestar bien a las preguntas, sino del modo en que se responden.

Estas recomendaciones generales te ayudarán a ir preparado a este encuentro. Ten confianza en tí mismo y en tus conocimientos. Sé tu mismo y muéstrate como tal.
¡Buena suerte!

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